MANIFESTACIÓN :OTAN NO ,BASES FUERA

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CONCENTRACIÓN
Sábado 4 de Abril, 19 hs. Puerta del Sol

¡No queremos pagar ni vuestras crisis, ni vuestras guerras!

OTAN NO, BASES FUERA

El próximo 4 de abril tendrá lugar en Baden-Baden y Estrasburgo una Cumbre de Jefes de Estado de países miembros de la OTAN, incluido el nuevo presidente de EE.UU., para celebrar su 60 aniversario. En ella se adoptarán medidas encaminadas a aumentar los gastos militares y la participación de cada Estado en los objetivos de expolio del imperialismo euro-estadounidense en todo el mundo.
Contra ella se preparan grandes movilizaciones en todos los países con el lema: ¡No queremos pagar ni vuestras crisis, ni vuestras guerras!

Cada vez es más evidente el papel de la OTAN como brazo armado del capitalismo en todo el mundo, con la complicidad necesaria y entusiasta de los gobiernos de sus Estados miembros en las guerras de expolio de recursos naturales a lo largo y ancho del planeta.
Desde la red Gladio a los vuelos y cárceles secretas de la CIA, hay una negra historia de asesinatos políticos, atentados, manipulación informativa, desestabilización y, en general de “guerra sucia” que revela las dimensiones del control y la intervención de la OTAN como puño de hierro del imperialismo en todo el mundo, incluidas las supuestas democracias occidentales.
En 1999, en el momento más álgido de los bombardeos sobre la ex-Yugoslavia, en su cumbre de Washington (financiada por las multinacionales de armamento y grandes empresas de todo tipo, incluida la industria farmacéutica) cambió su estrategia “defensiva” y su ámbito de actuación a los límites territoriales de sus Estados miembros. Dos años antes del 11-S de 2001 se adoptó el principio de la “guerra preventiva” para intervenir militarmente en todo el planeta cuando la “seguridad nacional”, léase necesidades energéticas, posesión de armas “de destrucción masiva”por otros países, e incluso migraciones masivas, estuviera en riesgo.
Escalada militar de la OTAN

Desde entonces la escalada militar no ha cesado en todas las regiones del mundo que cuentan con recursos naturales, sobre todo energéticos, y en los que los pueblos están plantando a cara a la dominación imperialista.

l En Afganistán decenas de miles de soldados de la OTAN (entre ellos 778 del ejército español), bajo el ridículo pretexto de capturar a Ben Laden y desactivar su red Al Qaeda – creación directa de la CIA, intentan apoderarse un país clave para el control de los recursos energéticos y para asegurar el proyecto imperialista en Asia Central. Los resultados son desastrosos ante una resistencia que goza de cada vez mayor apoyo popular y controla más del 70% del territorio.
l En Oriente Medio, la OTAN desarolla un plan de dominación integral político-militar-económico-cultural, llamado Diálogo Mediterráneo, que pretende incluir a todos los países árabes en el Proyecto Gran Oriente Medio, sobre el eje Israel-Turquía, y que incluye un potente operativo naval que controla militarmente el Mediterráneo Oriental. La victoria de la Resistencia en Líbano en 2006, la más reciente en Gaza y sus dificultades en Iraq, muestran la voluntad insobornable de sus pueblos de resistir. La última ignominia es la colaboración de buques de la OTAN con Israel en el bloqueo a Gaza

l En África, también la presencia de la OTAN y de tropas del imperialismo asociado de EE.UU y la UE sirve al objetivo de apropiarse de los recursos naturales de sus pueblos, instigando guerras que asolan un continente del que parten centenares de miles de emigrantes que encuentran la muerte, la persecución y/ o la esclavización en los países responsables de la depredación de sus riquezas.

l Hasta América Latina, hasta hace pocos años considerada patio trasero exclusivo de EE.UU., ante la escalada de luchas y de victorias de sus pueblos, ha llegado la presencia militar directa de la OTAN, con presencia de portaaviones, submarinos nucleares y miles de efectivos, en operaciones recientes, como la Joint Caribe Lion, amenazando directamente a Cuba y Venezuela.
El Estado español cómplice e intervenido

Una de las mayores estafas de la historia fue la que se produjo con ocasión del Referéndum de la OTAN en 1986 convocado por el gobierno del PSOE. En medio de chantajes, amenazas, censuras y manipulación informativa sin precedentes gano un SI (con un 40% de voto en contra), que incluía como condiciones: la no participación en el Comité Militar de la OTAN, la disminución progresiva de las bases de EE.UU y la prohibición del paso o instalación de armamento nuclear en nuestro territorio. La constatación cotidiana de su vulneración es bien patente.

Tanto los gobiernos del PSOE como los del PP han intensificado nuestra integración en todas las aventuras militares del imperialismo de la UE y de EE.UU a través de la OTAN.

La retirada de tropas españolas de Iraq en 2004, fue seguida de un aumento de su presencia en Afganistán, y de su participación en una ocupación militar encubierta de Líbano, controlada por la OTAN. Por más que trataron de disfrazar estas operaciones de “misiones humanitarias”, se puede constatar que la presencia de las tropas sirven a los planes imperialistas en la ocupación que asegure el control de los recursos energéticos de estos países aún a costa de provocar cientos de asesinatos de civiles.

El escándalo de los vuelos de la CIA, con más de un centenar de escalas en nuestro suelo, revelan la complicidad directa entre los servicios secretos y los gobiernos, y echan por tierra cualquier idea de soberanía y de respeto al derecho internacional.

El amplio sentimiento de rechazo popular a las guerras imperialistas, que se ha expresado con centenares de miles de personas en la calle – tanto contra la invasión de Iraq, como recientemente frente a la agresión sionista al pueblo de Gaza – debe manifestarse contra la mayor y más brutal estructura de dominación del imperialismo del mundo, la OTAN.
Debemos hacerlo, no solamente por solidaridad con los pueblos que sufren directamente la intervención militar de una organización de la que formamos parte. Nosotros estamos también directamente concernidos.

Ante una crisis general del capitalismo, que arroja a millones de personas al paro y que pone en grave riesgo prestaciones sociales y servicios públicos, no es admisible que los gastos militares se disparen. Es directamente indecente que habiendo más de un millón de personas paradas que no cobran seguro de desempleo, el Estado español sea el segundo de la OCDE con mayor gasto en investigación militar o que el gasto en defensa haya aumentado en lo últimos años en 3.000 millones de euros.

Ahora, más que nunca, debemos exigir la salida del estado español de la OTAN y su inmediata disolución, el desmantelamiento de todas las bases militares de la OTAN y de EE.UU y la retirada inmediata de todas las tropas españolas en otros países.

convocantes: Asamblea contra la globalización capitalista y la guerra, CAES, Coordinadora Estatal de Solidaridad con Cuba-Madrid, Corriente Roja, Cristianos de Base, Cristianos por el Socialismo, Iniciativa Comunista, Plataforma Sierra Norte, Partido Comunista de los Pueblos de España, Vía Democrática (Marruecos)